Las «Contribuciones a la psicología del amor» agrupan tres textos publicados entre 1910 y 1918, cuya reunión habría de ser un anhelo constante de Freud. ¿Qué dicen esos textos del amor? Paradójicamente, que es una cuestión de escisión. Escisión del objeto del amor entre las dos figuras (aunque no son exactamente figuras) de la mamá y la puta, y falta de conjunción de la corriente tierna y la corriente sensual, de la cual resultan la impotencia psíquica en el hombre («cuando aman no anhelan, y cuando anhelan no pueden amar») y, en la mujer, la negociación compleja con la prohibición. Toda paradoja obedece a una doble lógica. En la primera, la paradoja es casi exclusivamente un modo de presentación de una difícil verdad: cuando esta aparece, aquella desaparece. Así, la escisión del amor está presa en otro clivaje, de mayor alcance, que separa las «exigencias de la sexualidad» de los «requerimientos de la cultura». La segunda lógica, por su parte, pregunta con insistencia por qué ha sido necesario recurrir a la paradoja; lo que esta dice solo puede entonces aprehenderse mediante la inmersión en el propio texto que la pone en ejecución: la difícil y sublime escritura de Freud.